domingo, junio 11, 2006

El Último Combate

Con este título tan espectacular empieza la columna de esta semana.
Para entrar en situación, imagina una peli de peleas y palos, en la que el bueno lleva cobrando cosa de hora y cuarto, casi desde el principio. Poco a poco, ha ido enfrentándose a enemigos más difíciles que los anteriores, aprendiendo trucos, trampas y técnicas nuevas. Llega el momento de la última lucha, de enfrentarse al último rival, el más malvado y difícil de ganar. Si vence, alcanzará un estado de plenitud espiritual, un contrato decente en una empresa de palos y una palmadita en la espalda. (Lo siento tío, en esta peli no hay chica para el que gana, yo no escribí el guión).
El combate es a muerte. Así que si pierde... Bueno, la verdad es que lo que venga después le importa bastante poco.

Las gradas del estadio están a rebosar. En el centro han montado un ring para ver cómo al bueno le dan tortas de todos los colores. Pocos apuestan por él. Su abuela, su padre, y un tipo despistado que se equivocó. Su abuela, esperanzada y orgullosa. Su padre, triste por la inminente pérdida de dinero.

Los contendientes atraviesan las cuerdas, y se sitúan en esquinas opuestas del cuadrilátero. El arbitro, pensando en su jubilación, también apostó por el malo. Coge un micro y comienza las presentaciones:


- ¡¡¡Damas y caballeros, a mi izquierda, con 300 combates sin perder, 2500 kilos, 4 cuernos y color rojo.... el terrible dragón Compilador!!!

Una gran ovación recorre el estadio; gritos, aplausos. El dragón echa fuego por la nariz, la boca, y otros orificios de salida. El público está enfebrecido

- Y a mi derecha, con sesenta kilos y medio, calzón azul y... ehm, bueno, ahora, ¡con calzón marrón!... ¡elamigodeunamigo!

Un par de aplausos y ánimos desde la última grada. El despistado de antes ha resultado ser además un optimista, y no da por perdido su dinero.

Suena la campana; los luchadores se ponen en pie listos para la pelea...

Así más o menos es como veo yo mi último exámen de la carrera. Aún faltan dos semanas, pero os mantendré informado. Mientras tanto, se admiten apuestas.

La pregunta de la semana es: ante las situaciones difíciles, ¿salis a luchar contra el dragón, u os meteis debajo de la alfombra? Buena suerte a quien se examine en Junio. Y para los demás también.